Amelia Possanza da vida a las historias de amor lésbico de la historia

Esto es LIBRO ABIERTO, una columna mensual en la que preguntamos a los autores debutantes sobre sus hábitos de lectura y escritura. El mes pasado, hablamos con el autor nigeriano-británico Stephen Buoro sobre su audaz novela sobre la mayoría de edad Los cinco misterios dolorosos de Andy Africa. Para esta entrega, hablamos con Amelia Possanza sobre Lesbian Love Story: A Memoir in Archives, un relato tejido con precisión de siete romances lésbicos a lo largo de los años, que abre un camino desde los fragmentos de Safo hasta un espectáculo de drag king en Bushwick. De lo que alguna vez estuvo perdido y oscurecido, Possanza ofrece un nuevo canon lésbico que cambia el género en su esfuerzo por, como nos dijo, "recuperar y reinventar los elementos íntimos de la historia lésbica que se han perdido, destruido y olvidado por la tradición". archivo." A continuación, la autora responde a nuestro cuestionario, comparte sus pensamientos sobre Moby-Dick ("simplemente un tipo que está haciendo el tonto"), el libro de Sadiya Hartman que fue parte integral de la concepción del suyo propio y escribiendo en el metro.

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¿Dónde te gusta escribir? Si las cosas van según lo planeado, escribo en la sala de estar en una vieja mesa de costura con patas de hierro y agujeros en la parte superior de donde la máquina D&D fue arrancada de la madera. Una buena amiga mía es artista de la fibra y siempre dice que una computadora es solo el último y más complejo modelo de telar. Me gusta decirme a mí mismo que escribir es una especie de costura, aunque no tenga las habilidades técnicas para respaldarlo. Cosiendo piezas juntas, cuidando las costuras individuales sin perder de vista la forma general. Dicho esto, la mayoría de los días a menudo pospongo las cosas durante tanto tiempo que tengo que salir corriendo por la puerta principal antes de terminar de escribir, así que tengo que conformarme con escribir notas de iPhone para mí en el metro. Algo sobre la contracción del tiempo, el impulso del tren hacia adelante y el murmullo de las vidas de otras personas agudiza mi enfoque.

¿Cuándo te gusta escribir? Al crecer, siempre tenía que despertarme antes del sol para ir a la práctica de natación, lo que me convirtió en una persona madrugadora a una edad temprana. No hay nadie con quien hablar, nada que hacer. El día podría ser cualquier cosa, en blanco como la página, ambos igualmente llenos de posibilidades. A veces, desearía que pudiera ser mañana para siempre.

¿Qué es lo primero que hizo después de entregar un borrador de su libro? ¡Inmediatamente ingresé a mi correo electrónico de trabajo! Trabajo a tiempo completo como publicista de libros (y, como mencioné, soy un procrastinador), así que el día que debía entregar mi borrador, me levanté a las 6 a. m. para echarle un último vistazo a todo antes de enviar a las 9:07 a. m. y luego cambié a mi cuenta de trabajo. Sin embargo, más tarde ese día, cené con un amigo en un banco del parque, y mi entonces pareja trajo una botella de vino y una galleta vegana. A menudo encuentro más placer en las pequeñas rutinas de la vida, como escribir, que en las grandes celebraciones.

Cuéntenos acerca de tres a cinco libros que lee mientras escribe el suyo propio, y por qué. Todo mi libro surgió de un amor por la lectura y un deseo de leer más de lo que las lesbianas han dicho, pensado, imaginado y cantado promiscuamente (estoy robando las palabras de Herman Melville aquí, aunque estaba escribiendo sobre Leviatán en Moby -Dick), por lo que es difícil reducir la lista a unas pocas fuentes. Sé que tengo que incluir Wayward Lives, Beautiful Experiments: Intimate Histories of Riotous Black Girls, Troublesome Women, and Queer Radicals de Saidiya Hartman porque me introdujo a su concepto de "fabulación crítica", un medio para llenar los vacíos en las historias. de los pueblos marginados al imaginar lo que podría haber sucedido de una manera que aún fuera fiel al período de tiempo, lo que se convirtió en una estrategia central en mis propios esfuerzos por recuperar y reinventar los elementos íntimos de la historia lésbica que se han perdido, destruido y olvidado por el archivo tradicional.

De hecho, tomé el libro para comprender mejor la vida de Mabel Hampton, una bailarina del Renacimiento de Harlem y cofundadora de Lesbian Herstory Archives que vivió con su pareja Lillian Foster durante más de 40 años. También leí una de las novelas favoritas de Mabel, Loving Her de Ann Allen Shockley, una novela de amor interracial de la década de 1970 que probablemente fue una de las 300 novelas que donó a Herstory Archives. "No es una novela estilísticamente exitosa", como escribe la académica Alycee J. Lane en el prólogo, pero me pregunto cuánto de su propia vida vio Mabel reflejada tanto en las escenas de sexo explícito de la novela como en el espectro de abuso físico que se cernía sobre ella. la vida de los personajes.

Descubrí The Red Zone: A Love Story de Chloe Caldwell hacia el final de mi proceso de escritura, y aunque tiene muy poca superposición con el tema de mi propio libro, sirvió como un modelo exquisito de cómo combinar una investigación meticulosa, en el estilo de Chloe. caso, sobre períodos y productos menstruales a lo largo de las décadas, con antecedentes personales vulnerables.

Cuéntanos sobre una experiencia formativa de lectura temprana. El poema de Maria Howe "Practicando" comienza: "Quiero escribir un poema de amor para las chicas que besé en séptimo grado". Recuerdo haber visto esa línea con el rabillo del ojo cuando se suponía que debía estar leyendo algo en la página opuesta en nuestra antología de literatura asignada en la escuela secundaria. Recuerdo haber pensado: "¡¿A los adultos se les permite escribir sobre chicas que se besan?!"

¿Cuál fue el último libro que amaste y por qué? Cambio de mar de Gina Chung. Vine por el pulpo gigante llamado Dolores, y me quedé por la trama demasiado identificable sobre las dificultades de construir una vida plena frente al dolor, las expectativas familiares y el rápido cambio climático.

El último libro que te decepcionó, ¿y por qué? Ciclismo para damas de Maria "Violet" Ward, con ilustraciones explicativas basadas en fotografías de Alice Austen de la gimnasta Daisy Elliot, tres lesbianas poco conocidas de la era victoriana que vivían y amaban en Staten Island, está llena de alucinantes sugerencias sobre cómo lo mejor para montar una bicicleta con una falda gruesa e instrucciones de mantenimiento para una máquina que se ha modernizado y mejorado innumerables veces desde que el libro se publicó originalmente en 1896. Sus páginas no contienen nada del drama romántico que tuvo lugar detrás de escena del libro. publicación. Daisy y Violet eran una pareja romántica, aunque a medida que avanzaba el proyecto, el afecto de la modelo comenzó a cambiar del escritor al fotógrafo. En julio de 1895, probablemente ya trabajando arduamente en el proyecto del libro, Daisy le escribió a Alice: "Como le dije a Violet el otro día: te amo, y si algo le pasara a ella, deberías ser la primera a quien acudir. " En lo que respecta a la narrativa, sus cartas probablemente habrían sido una lectura más interesante que un manual de bicicletas, aunque muchas se han perdido y las que quedan aún no se han publicado ampliamente.

¿Tapa dura o rústica? ¿Por qué?Libro en rústica, porque soy un monstruo al que le encanta doblar hacia atrás la portada (y su padre está a punto de repudiarlo por admitirlo).

Un libro que crees que debería estar en el canon, pero no lo está:People in Trouble de Sarah Schulman está actualmente agotado en los EE. UU., pero me encantaría ver este relato ficticio de la crisis del SIDA (y la historia de amor sáfico ilícito) que centra a las mujeres queer en el lugar que le corresponde en los estantes.

Un libro que crees que no debería estar en el canon, pero es: Moby Dick de Herman Melville. Este es solo un tipo que está holgazaneando, explorando su interés en las ballenas, pasándoselo genial. Es un libro muy divertido, y creo que la gente lo extraña porque se considera "canónico".

¿Cuál es tu(s) librería(s) favorita(s)? Mi madre me repudiaría si no mencionara el nombre de la librería donde trabaja en Pittsburgh, City of Asylum, que surgió de una organización sin fines de lucro que alberga a escritores en el exilio de sus países de origen. Ha sido una agradable sorpresa ver florecer las librerías en mi ciudad natal. ¡Hay tantos más ahora que cuando yo era niño! Ballena blanca. Libros Riverstone. Libros y discos asombrosos. Caliban Books en Craig Street, que existe desde que solía visitar a mi papá en el trabajo, y él me ayudaba a imaginar mi propio libro entre las pilas. "Mira cuántos libros académicos sobre literatura hay", decía. "Es mejor escribir tu propio libro, en lugar de escribir sobre el de otra persona".

¿Qué buscas en una experiencia de lectura?Quiero sentir que el autor se está divirtiendo y que yo solo lo acompaño.

¿Cómo organizas tu estantería? Si amo un libro, inmediatamente se lo regalaré a un amigo para tener a alguien con quien hablar sobre él. La desventaja de ese hábito es que mis estantes están llenos de libros que no he leído o que no me gustaron, así que no pienso mucho en cómo ordenar los desechos restantes. Sin embargo, cuando estoy a punto de comenzar un nuevo proyecto, recopilo todo el material de origen relevante y lo amontono en el borde de mi mesa de costura como una invitación para volver al trabajo.

¿Alguna vez has mentido sobre haber leído un libro? ¿Si es así, Cuál? En primer grado, mentí acerca de leer todos los libros que cruzaron mi escritorio. Tomaría uno de la biblioteca de nuestra clase, lo mantendría abierto en cada página durante lo que parecía una cantidad de tiempo adecuada, lo devolvería y luego repetiría. Me negué a aceptar una calcomanía brillante de "Reserva" para ganar una pizza gratis de Pizza Hut porque me pareció ir demasiado lejos en mi engaño. Nadie se había dado cuenta de que necesitaba gafas y apenas podía ver el texto. Me gusta pensar que todavía estoy compensando todos los libros que no leí durante ese año perdido.